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Portallaves magnético

Ideas creativas para manualidades en madera
Autor: J.P. Radeke, Sulingen
En línea desde: 22.03.2012, n.º de visitas: 210840
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Índice

Portallaves magnético con revestimiento de cuero

Concebir la forma y cortar la madera

Lo primero que hice fue pensar en cómo iba a ser el contorno de mi portallaves magnético. Al final me decidí por un pez con una forma algo particular. Los círculos con una cruz dentro indican la posición de los superimanes, de los que después colgarán las seis llaves. El diseño se puede elegir libremente; el portallaves en forma de pez solo pretende servir de inspiración.
El siguiente paso fue recortar con una sierra la tabla para el portallaves. Para ello, tracé el contorno de la plantilla sobre un tablero aglomerado y lo recorté con ayuda de una sierra de calar. El material tiene un espesor de 8 mm (igual que el de los imanes) para que todo quede lo más al ras posible. Después, repasé los bordes cortantes con papel de lija.

Perforar agujeros y pegar imanes

Luego perforé ocho agujeros con un diámetro de 15 mm y también los lijé. Ahora era el turno de los superimanes. Utilicé 8 discos magnéticos S-15-08-N Los pegué con pegamento fuerte en los agujeros. Al hacerlo, hay que asegurarse de que los imanes estén completamente al ras en la parte delantera para evitar que después queden defectos en la superficie. Para ello, es posible que sea necesario retocar los agujeros con una lima.
Cuando esté todo seco, la tabla se debe volver a revisar y retocarla, si es necesario. No puede tener agujeritos ni otras imperfecciones. Para ello, lo mejor es sujetarla a contraluz y reflejar la superficie. De esta forma se detecta hasta el más mínimo defecto. Si tiene agujeritos, se pueden tapar, por ejemplo, con masilla y, después, pulirlos.

Cómo forrar el portallaves con cuero

Antes de forrar el portallaves (es decir, de recubrir la tabla con una lámina de plástico o cuero), hay que quitarle el polvo mediante aire comprimido o un paño húmedo. Después, rocié con pegamento tanto la tabla como el cuero rojo que había elegido. Cuando el pegamento empezó a secarse, lo activé de nuevo con un secador. Una vez que el cuero y la tabla estuvieron bien calientes, tensé el cuero con ayuda de tres amigos y lo coloqué por encima de la tabla. Después, le quité las arrugas que quedaban con el secador. Ahora solo tenía que secarse bien el pegamento.
Para que el pez también quedara bien de lado, tuve que tensar el cuero por encima de los bordes y fijarlo en la parte trasera (lo que se conoce como «rebordeo».) Para ello, volví a rociar el borde y el cuero con el pegamento y dejé que empezara a secarse. Después, lo fui calentando trozo a trozo y doblando el cuero por los lados. Finalmente, recorté el cuero y las arrugas que sobraban y grapé el borde.

Atornillar soporte mural

Encargué realizar con láser el pez de acero para el portallaves a partir de un modelo determinado. Para protegerlo de la corrosión y para que, visualmente, quedara mejor, pedí que también lo pulieran, desbarbaran y cromaran. Una vez listo, lo fijé a la tabla ya forrada. ¡Hay que ir con cuidado para no dañar el cuero!
Después desmonté el soporte de pared de nuestro portallaves anterior y lo atornillé al nuevo con tornillos Spax. De esta forma, pude aprovechar los tornillos de la pared y conservar la posición y altura a la que ya estábamos acostumbrados antes.

Cómo colgar el portallaves

Finalmente colgué de los tornillos el portallaves acabado. Además, supermagnete.fi me envió 10 cubos magnéticos W-05-N de regalo y, sin pensarlo dos veces, los incorporé al pez de metal y lo convertí en un tablón de notas para toda la familia.
Al final, ha quedado un estupendo portallaves de diseño de alta calidad, y sobre todo hecho a mano, que funciona también como tablón de notas y que se integra a la perfección en la vida cotidiana de una familia.
Nota del equipo de supermagnete:
Hoy en día, la mayoría de las llaves ya no son magnéticas. En esta aplicación lo que se adhiere a los imanes ocultos es el aro de hierro de las llaves, no las llaves en sí.

Estante con portallaves magnético

Aporte del cliente A. Zieseniss, Sils-Maria (Suiza):
Para tener un poco más organizada la enorme cantidad de llaves que tengo, he hecho un portallaves magnético de madera que, además, sirve de estante.
Material necesario/Herramientas
  • Tabla de madera de nogal (60 x 15 x 4,5 cm)
  • 9 discos magnéticos con taladro avellanado CS-S-27-04-N
  • Tornillos de cabeza avellanada galvanizados, 4 x 16
  • Varillas roscadas M8 (+ 2 tuercas para atornillar)
  • Tacos de latón Fischer M8
  • Taladradora (broca Forstner de 30 mm y broca para madera de 8 mm)
  • Martillo perforador (broca para piedra de 10 mm)
  • Atornillador eléctrico
  • Sierra para metales
  • Llave de boca de 13 mm
Primero, he lijado la tabla y le he dado una capa de Holzbutter, un producto de cuidado para la madera.
Con la taladradora de pie y una broca Forstner de 30 mm, haga los orificios ciegos para colocar los imanes en la parte inferior con una profundidad de 4 mm y, después, introduzca los imanes roscándolos con los tornillos de cabeza avellanada.
En la parte posterior, haga dos agujeros (8 mm) para introducir las varillas roscadas. A continuación, perfore en la pared dos agujeros exactamente a la misma distancia que los de la parte posterior de la tabla.
Coloque los tacos y atornille las varillas con ayuda de dos tuercas. Cuando las varillas estén bien atornilladas, las tuercas se pueden volver a quitar, ya que solo sirven para facilitar el atornillado. Después, coloque el portallaves en las varillas.
Debido al campo magnético, evite dejar sobre el estante monederos.
Como puede observarse, no son las llaves las que se adhieren a los imanes, sino los anillos de metal. Sin embargo, las llaves más pequeñas (como las del buzón) suelen ser magnéticas.
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